Praga tiene la suerte de contar con cafeterías realmente bonitas, ubicadas en edificios históricos con una arquitectura espectacular. Muchas de ellas, además, han sido frecuentadas por personajes ilustres, lo que les añade un aire especial. Viajar a Praga permite descubrir estos acogedores rincones que, en invierno, son el refugio perfecto para escapar del frío, aunque son ideales para visitar en cualquier época del año, ya sea para tomar un buen café o simplemente disfrutar del ambiente. Como seguro querréis visitar alguna, aquí os dejamos una selección de las 5 mejores cafeterías de Praga.
Índice de Contenidos
Mapa de las mejores cafeterías de Praga
Para que no os perdáis buscando alguna de las mejores cafeterías de Praga que os hemos dejado en esta lista, tenéis a continuación un mapa que contempla a todas ellas. Solo tenéis que situaros en el mapa e ir rumbo a por alguna de ellas.
Café Imperial de Praga
Ubicada en el Hotel Imperial, esta cafetería es una muestra de elegancia desde su apertura en 1914. Aunque su fachada de color gris puede parecer sobria, su interior es una obra maestra de mosaicos de cerámica, techos ornamentados y columnas decoradas. Además de sus famosas tartas y cafés, el Café Imperial también ofrece un menú completo para almuerzos y cenas. Así que, ya sea para tomar un café, un té o disfrutar de una cena exquisita, es una parada obligada. Los precios son medios-altos, pero la experiencia vale cada céntimo.
Café de la Casa Municipal
Esta cafetería de Praga deslumbra con su elegante decoración, tanto por fuera como por dentro. Está situada dentro de la Casa Municipal, un edificio construido entre 1905 y 1912 en estilo Art Nouveau. Los techos altos, las lámparas de cristal y los muebles de época crean un ambiente sofisticado y elegante. El edificio, uno de los más destacados de Praga, ha sido escenario de eventos históricos, como la proclamación de la independencia checoslovaca en 1918. Los precios del café son medio-altos, pero merecen la pena por la belleza del entorno y la calidad de los productos.
Café Louvre
Que no os confunda el nombre, no estamos en París, El Café Louvre de Praga data del año 1902, y ha sido un punto de encuentro de intelectuales y artistas, incluyendo a figuras tan ilustres como Franz Kafka y Albert Einstein. Su diseño es una mezcla de estilos Belle Époque y Art Nouveau, con techos altos y amplios ventanales que iluminan el salón. A pesar de su prestigiosa historia, es sorprendentemente accesible, con precios medios y un extenso menú que incluye desde desayunos y brunch hasta almuerzos y cenas. Es un lugar ideal para disfrutar de un ambiente clásico y literario en pleno centro de Praga.
Café Savoy
El Café Savoy es un verdadero emblema de la elegancia de finales del siglo XIX. Situado en el barrio de Malá Strana, abrió sus puertas en 1893 y ha mantenido su estilo neorrenacentista original. Este lugar es conocido por su exquisita repostería y su menú que incluye tanto especialidades checas como internacionales. El ambiente es acogedor, pero al mismo tiempo sofisticado. Los precios son de rango medio-alto, acorde con la calidad de la comida y el ambiente.
Grand Café Orient
El Grand Café Orient es una auténtica joya del cubismo checo. Data del año 1912, y está situado en la emblemática Casa de la Madona Negra, uno de los edificios cubistas más importantes de Praga. El interior del café sigue fielmente el diseño cubista, con muebles, lámparas y detalles que reflejan las formas de este movimiento artístico. Se sitúa en la primera planta del edificio, a la cuál podéis subir en ascensor.
Esta cafetería no solo destaca por su diseño, sino también por su menú, que incluye pastelería tradicional y una buena selección de cafés. A pesar de su exclusividad, los precios son bastante razonables, con opciones de rango medio.
Café Myšák
Ubicado en el corazón de la Ciudad Nueva, muy cerca de la Plaza Wenceslao, el Café Myšák data del año 1911. Este café fue uno de los más célebres de Praga en su época dorada, famoso por sus deliciosas tartas y su ambiente chic. Aunque el edificio original fue destruido, el café ha sido restaurado manteniendo la esencia de sus días de gloria, con un interior art déco encantador. Aquí podéis disfrutar de repostería de alta calidad, destacando sus pasteles y tartas, en un ambiente histórico que no ha perdido su encanto. Los precios son accesibles, con opciones de rango medio.
Bueno Molaviajer@s, esperamos que si visitáis alguna de estas cafeterías de Praga, que son nuestras favoritas para tomar un café y algo más, aderezado con algo de historia y mucho encanto, disfrutéis de la estancia tanto como nosotros. Estamos seguros de que en ellas podréis saborear Praga no solo desde un punto de vista gastronómico, sino también histórico y artístico. Y ya sabéis, cualquier duda que tengáis acerca de este u otros destinos, escribidnos y os echamos una mano a la mayor brevedad posible.
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