Miradores de Nueva York ¿Con cuál quedarse?

¿Qué tal, Molaviajer@s? Muchas veces nos preguntáis, de todos los miradores de Nueva York, a cuál hay que subir sí o sí. Empire State, Top of the Rock, Edge, One World Trade Center y Summit son las opciones que actualmente ofrece la Gran Manzana. La verdad, es difícil decantarse solo por uno, ya que todo depende de gustos. Dicho esto, y después de haberlos visitado todos, algunos varias veces, vamos a contaros los pros y los contras que tiene cada observatorio, para que podáis decidir mejor a qué rascacielos subir en la Gran Manzana. 

Empire State Building, el primer mirador de Nueva York 

Se encuentra en la 34th con la 5th Ave y a día de hoy es el cuarto edificio más alto de Nueva York con 102 plantas. Os dejamos por aquí una guía para subir al Empire State  donde vienen todos los detalles de entradas, precios, horarios y demás, y por aquí, un post con historia y curiosidades del Empire State en el que no falta una ilustración descargable, King Kong incluido. 

¿Por qué mola subir al Empire State? Pues por varios motivos:

– El Empire State es un edificio histórico. Ha salido en un montón de películas, series y programas de televisión. Subir al Empire State es como formar parte de la historia de Nueva York, aunque sea a niveles minúsculos, y es que fue el primero de los miradores de Nueva York en abrir sus puertas.

-Se encuentra en el puro centro de Manhattan, lo que permite tener unas vistas espectaculares de toda la isla (y alrededores). 

– Ha sido recientemente renovado en su interior, adaptándose un poco a las modernidades del resto de observatorios de la ciudad. Le ha venido genial el lavado de cara porque se había quedado algo anticuado. 

– La terraza de la planta 86 es uno de los lugares que hay que visitar en Nueva York al menos una vez en la vida. Eso sí, si lo visitáis en invierno, recordad abrigaros, ¡que la altura no perdona, y si hace aire, menos!

Pero el observatorio del Empire State también tiene sus pegas. Por ejemplo, que la terraza exterior del piso 86 está rodeada de una verja que, de no ser que saques la cámara por los agujeros, sale en las fotos. Y si quieres fotos sin interrupciones en las vistas, tienes que subir al piso 102 y luchar contra los reflejos de los cristales, ya que el vidrio lo rodea 360º y de suelo a techo.

La entrada al observatorio Empire State Building está incluida en todas las tarjetas de atracciones de Nueva York, hasta el piso 86, os contamos este tema más abajo. Si queréis subir hasta la planta 102, tendréis que pagar un upgrade en taquilla. Si no disponéis de pase, podréis haceros con una entrada a continuación . 

En el siguiente vídeo, os explicamos más sobre él:

Nuestro momento predilecto para subir al observatorio del Empire State es el atardecer, pero si llegáis tarde, la noche es un buen momento, ya que al estar engullido por el centro de Manhattan, las luces de la ciudad te ayudan a encontrar el resto de puntos importantes de la Gran Manzana.

Top of the Rock, el observatorio de Nueva York con vistas al Empire State

El Top of the Rock, sin duda, es uno de los miradores de Nueva York que más nos gustan. Fijaos que incluso sacamos desde allí la foto de la portada de nuestra guía de Nueva York. 

Se encuentra en pleno Rockefeller Center, en Midtown Manhattan. Su observatorio es uno de los más versátiles de Nueva York, ya que dispone de tres plantas, una interior, y otras dos exteriores, que se elevan hasta el piso 70. 

Una de las peculiaridades que lo define, es que en su última planta, no hay ningún tipo de obstáculo a la hora de hacer fotos: ni verjas, ni cristales, nada. ¡Esto permite hacer unas fotos chulísimas!

Una de las pegas del Top of the Rock, es que al norte ofrecía unas vistas perfectas de Central Park, hasta que se pusieron a construir edificios en la billionaires row de Manhattan. Por desgracia, eso está cambiando cada día que pasa, dado que los nuevos edificios, obstaculizan estas vistas. ¿Se sigue viendo? Sí, pero es como cuando vas al cine y te toca alguien alto delante, que la película se queda un poco a medias. 

Sin embargo, el plato fuerte viene cuando miras al sur de la isla desde la planta 70. Y es que, ahí está el Empire State, imponente, reinando en Midtown Manhattan junto a la torre del Banco de América, y de fondo, el One World Observatory. 

Al igual que con el Empire State, podéis comprar la entrada para subir al Top of the Rock o bien podéis utilizar cualquiera de las tarjetas de atracciones de Nueva York, ya que todas lo incluyen a día de hoy. Y si no tenéis un pase de atracciones, podréis haceros con una entrada aquí. 

De nuevo, el momento predilecto del día para subir, es el atardecer, pero estas entradas suelen costar un poco más caras. Para remediarlo, podéis subir un poco antes del atardecer y recibirlo allí. 

Si este plan no os encaja, subid de día mejor que de noche. Al ser de día, podréis apreciar mejor las vistas al norte, con Central Park de protagonista. Si subís de noche, tan solo veréis un gran rectángulo apagado. 

Hay que decir, que dentro del edificio e independientemente del observatorio, aunque también en las plantas superiores, está el Rainbown Room, un bar/restaurante en el que podréis tomar algo previa reserva. La consumición es un poco cara, pero es el precio a pagar por las vistas. 

One World Observatory, uno de los miradores de Nueva York más emocionante

La emoción se apodera de este rascacielos de la Gran Manzana por partida doble. Es el edificio que ocupó parte de la zona cero tras los atentados del 11s y la caída de las Torres Gemelas. Ya solo por eso, pone la piel de gallina. Pero es que, además, solo el hecho de subir al observatorio del One World Trade Center, supone toda una experiencia que emociona a todo aquel que ame Nueva York. 

Ya es el edificio más alto de Manhattan, y con él, su mirador, completamente interior y acristalado. Esto permite hacer fotos de las vistas, previa lucha contra los reflejos del cristal. 

Como os contamos en nuestro post del One World Trade Center, este ofrece unas muy buenas vistas de toda la zona sur de Manhattan, Estatua de la Libertad incluida, y por supuesto, de todo el skyline del norte de Manhattan, coleccionando todos y cada uno de los grandes edificios de esta ciudad. Pero es que, además, la subida es una de aquellas cosas que todo neoyorquino ha de hacer al menos una vez en la vida. 

Quizá un punto negativo, sea que no dispone de ninguna parte del observatorio al aire libre. ¿Es un poco fastidioso? Quizá sí, porque las fotos son a través de cristales, pero sin duda y dado el histórico del edificio, esto les ayudó a construir un rascacielos más robusto. 

Como no podía ser de otra manera, el One World Observatory también entra con ciertas tarjetas de actividades neoyorquinas, y si no disponéis de una de ellas, podréis comprar la entrada desde el siguiente enlace.

Si acudís con una tarjeta turística, al validarla os ofrecerán pagar un upgrade de 10$ para subir al rascacielos de manera inmediata o de 5$ para hacerlo en media hora. Si podéis esperar una hora a subir, no será necesario pagar nada. Nosotros, la última vez que lo visitamos, no quisimos pagar upgrade de ningún tipo y la persona de seguridad nos dijo que acudiéramos directamente a la fila de entrada. Como había pocos visitantes, pudimos ver el rascacielos sin necesidad de esperar. Tenedlo en cuenta y preguntad si lo visitáis.

¿Qué momento es para nosotros el mejor para subir? O de día, o al atardecer, ya que creemos que de noche no se aprecian tanto las vistas desde este mirador neoyorquino. 

Edge, el penúltimo en llegar a la lista de miradores en Nueva York

Situado en el nuevo barrio de Hudson Yards, se encuentra Edge, el observatorio al aire libre más alto del hemisferio oeste. 

Abrió en marzo de 2020 y su apertura duró un abrir y cerrar de ojos, ya que tuvo que cerrar en seguida para cumplir las medidas de seguridad sanitaria del 2020. Podemos decir que lo pudimos visitar en marzo, casi de casualidad. Fue entonces cuando escribimos este post sobre el Edge con vídeo. Su característica más reseñable es que posee una plataforma transparente en el piso 100 a través de la cual se ve perfectamente la vida (tamaño mini) a ras de suelo de Manhattan. ¡Sus 335 m de altura no son aptos para gente con vértigo!

Edge nos encantó porque es una manera de ver Manhattan desde otro punto de vista. Es un concepto de observatorio nuevo en Nueva York y a pesar de que la subida no es tan espectacular como la del One World, las vistas finales, (y las increíbles fotos que se pueden sacar de ellas) bien merecen la pena. 

A pesar de ser el último en llegar, no se escapa de incorporarse a ciertas tarjetas de atracciones, pero si queréis la entrada por separado, podréis adquirirla a continuación.

Nuestro horario predilecto para ver este observatorio es el atardecer, pero si esto no es una opción, el día es el mejor aliado del Edge. 

¿Lo más curioso? Que se puede escalar… Sí, sí, mirad:

Si la experiencia os ha convencido, lo mejor es que cualquiera puede llevarla a cabo. A continuación os dejamos más información sobre la misma:

El Summit, sin palabras…

Este es, de momento, el quinto mirador u observatorio de Manhattan que puede visitarse. Nos colamos en él (con permiso) mientras estaba en construcción. Y hemos podido ver el antes y el después. Aquí os dejamos el post con todo lo que podemos contaros sobre el Summit, el observatorio del One Vandervilt que sin duda se ha convertido ya en nuestro número 1 de los miradores de Manhattan. Juzgadlo por vosotros mismos:

Y como vale más una imagen que mil palabras, aquí tenéis el «después». Para nosotros merece (y mucho) la pena subir a este observatorio de Manhattan

Por el momento, el Summit es el único mirador de Nueva York que no está incluido en ningún pase de atracciones, así que si queréis visitarlo, tendréis que comprar la entrada por separado, bien en su web o bien en la siguiente web, por ejemplo:

¿Con qué tarjeta de atracciones se puede entrar a cada mirador?

La pregunta del millón, y es que hay tantas tarjetas de actividades, cada una con sus condiciones, que puede resultar un poco lioso, así que, a por ello:

New York CityPASS –-> permite subir al Empire State y da a elegir entre el Top of The Rock o el Museo Guggenheim. Deja subir dos veces al Empire en el mismo día, una por la mañana y otra por la noche. Para nosotros no es la mejor opción, ya que hay que invertir tiempo dos veces en hacer la fila de la entrada.

New York Pass –> hoy en día, con la New York Pass que utilizamos, por ejemplo, en esta ruta de 7 días por Nueva York, se puede acceder al Empire State, al Top of The Rock, al One World y Edge. Además, con el código NYP5MOLA os harán un 5% de descuento.

Sightseeing Day Pass –> También permite la entrada a los 4 miradores de Nueva York. Sí, sí, Empire State Building, Top of The Rock, One World Observatory y Edge. Tenéis un ejemplo de ruta de 5 días por Nueva York en el post linkeado. Tienes un descuento usando el código MOLAVIAJAR

Go City New York Explorer Pass –> La Explorer pass también permite el acceso a los cuatro miradores antes mencionados. Y si la compráis desde el link que os dejamos, poniendo el código de descuento GO5MOLA os harán un 5% de descuento.

Sightseeing Flex Pass –> Como su hermana mayor, la Sightseeing Day Pass, permite la entrada a los 4 observatorios de la Gran Manzana. ¡Mola! Con descuento usando el código MOLAVIAJAR

Eso sí, a día de hoy, ninguna de ellas da acceso al Summit, el observatorio más demandado de la ciudad en la actualidad. De todas maneras, como estas condiciones pueden cambiar a cada momento, lo que os recomendamos es que consultéis las webs oficiales (enlazadas arriba) para cercioraros de qué miradores de Nueva York están finalmente incluidos en cada tarjeta de actividades.

Consideraciones para subir a cualquiera de los miradores de Nueva York

Todos los miradores de Manhattan tienen ciertas cosas en común, como la prohibición de subir trípodes o materiales profesionales de fotografía, ya que para ello hay que pedir permiso, o las filas que se forman para pasar los controles de seguridad. En ellos, encontraréis arcos de seguridad y tendréis que pasar vuestros bolsos o mochilas por un escáner. Por este motivo os recomendamos que vayáis a verlos lo más ligeros posible, ya que os resultará más cómodo. Si llevarais el trípode te dirán de dejarlo y que lo recojas a la salida.

Eso sí, las largas filas que se forman esperando, suelen estar amenizadas por exposiciones, que hacen que la experiencia de subir al observatorio comience desde los pisos más bajos.

Y hablando de filas… Si queréis ver el atardecer, ¡estas suelen ser mucho más generosas! En general, los mejores horarios para no encontrarse mucha gente en la fila son las primeras y últimas horas del día.

¿Cuál es nuestro mirador favorito de Nueva York?

Sin rodeos, ¡nuestro mirador de Nueva York favorito es el Summit! por tener el mejor conjunto experiencia-subida-vistas. Le sigue de cerca el Top of The Rock por las vistas y One World Observatory, por la experiencia de la subida, que emociona a cualquier amante de la ciudad. Y empatan Empire State y Edge.

Eso sí, esta es solo nuestra opinión. Y es que todos los observatorios de Manhattan tienen algo, que los hace únicos y especiales.

Nuestro consejo es que subáis a todos los miradores que el viaje y el presupuesto os permitan y que intentéis espaciarlos entre día y noche, o intentar capturar el atardecer desde alguno de ellos. Así podréis tener vuestra propia opinión sobre cuál es el mejor de todos los miradores de Nueva York.

Bueno Molaviajer@s, esperamos que este post, con la recopilación de los 4 miradores de Nueva York abiertos a día de hoy en Nueva York os sirva de ayuda para preparar vuestro futuro viaje a la Gran Manzana o para viajar allí desde el sofá de casa. Ya sabéis que en cualquier caso, podéis preguntarnos vuestras dudas a través del formulario de contacto, que os responderemos ¡lo antes que podamos!

MolaViajar

¡Hola! Somos Adri y Gosi y, tras varios años viajando por el mundo decidimos dejar nuestras carreras profesionales para dedicarnos por completo a grabar, fotografiar y contar nuestras aventuras a través de este blog, nuestro canal de Youtube, redes sociales y, también, de nuestra propia editorial de viajes, en la que encontraréis muchos de estos destinos en su versión impresa.